Escuchar tu corazón (2o. mes)

Aunque todo lo dejamos en manos de Dios siempre debemos poner de nuestra parte, este mes ha sido una lista de cosas importantes por hacer y contemplar; tomar mucha agua, comer saludable, no cargar cosas pesadas, tomar el acido folico, evitar alimentos que provoquen nauseas, comer poco y muchas veces al día, dormir cuando el cuerpo lo pida, estar tranquila y relajada... y disfrutarlo lo más posible.
Parece sencillo y muy conveniente cuando en realidad no lo es, y hasta comer puede ser muy complicado, sobre todo por las nauseas y la consecuencia de ellas.

De forma muy selectiva estuvimos probando qué alimentos son recomendables y ademas puedo consumirlos sin que me provoquen algún malestar. Por ejemplo, los azucares light como el Aspartame, Fenilpropanolanina y Fenilcetanuricos no son nada buenos para adultos, mucho menos para el desarrollo del bebé, cuando empezamos a leer las etiquetas nos dimos cuenta que una cantidad importante de productos empaquetados contienen estos elementos, como por ejemplo, los chicles, golosinas, polvos para agua, bedidas embotelladas, tetrapack, entre muchos otros.
Es importante saber lo que nos llevamos a la boca, para esto leer las etiquetas de los productos nos proporciona un panorama muy claro de esto, quien iba a pensarlo, mi marido y yo, ¡¡leyendo las etiquetas!!.

La espera para el segundo eco fue muy pesada yo parecia un loro parlanchin repitiendo "Ya quiero verlo, ya quiero verlo". La constante incertidumbre no nos va bien a nadie menos en situaciones como esta.
Y es que es inevitable tener temor a despertarse y que no sea real, es tanta la emoción.

Hemos dado algunos pasos importantes en el proceso ya que comunicamos a nuestras respectivas familias acerca de la nueva vida que estamos cuidando, todos estan muy entusiasmados, incluso podría asegurar que ya hacen planes para nuestro Bebé, hacer participes a quienes Amas es muy reconfortante, la emoción crece. Para nosotros es una experiencia nueva y diferente, de ser expectadores a ser participes directos, o mejor aún estelares de este hermoso cuento...

He sabido que muchas parejas deciden comunicar dicho suceso hasta los tres meses, sin embargo, nosotros estabamos ansiosos de darles la noticia, siempre es bueno la charla en la que tus Padres recuerdan la anecdota de cuando supieron de tu existencia, o los pormenores penosos y graciosos que solo se cuentan entre familia... es parte de la confianza que generosamente hace que la comunicación fluya.

Como siempre, lo inesperado sucede, y por un susto fuimos a dar una semana antes a la consulta de urgencia... Sin previa cita llegamos, yo no iba vestida con mis mejores galas como me hubiese gustado para un día tan especial, sin embargo, algunas cosas pasan tan rapido que prioritariamente quería saber que el bebé se encontrará bien.

Gracias a Dios todo salió mejor de lo que esperabamos, y las sonrisitas volvieron, por fin pudimos ver el corazón del Pichoncito, es impresionante pensarlo, con más razón verlo, esa pequeña cosita de nosotros viviendo dentro, ya con una parte muy propia de él, su corazón latiendo con un ritmo único, que yo comparé con el latir del de su Papá ya que cuando me recuesto en su pecho puedo percibirlo.

Así bien, una pequeña imagen de nuestro bebé se apreciaba en el monitor, con un pedacito casi al centro de su cuerpo moviendose de forma ritmica, es genial como bailó mi corazón al ver su corazón, creo que nos gusta "el buen ritmo".

Esta maravillosa maquinita - su corazón - ha empezado a funcionar en su fragil cuerpo, ahora está bombeando sangre por sí mismo, haciendo competencia a mis latidos, los suyos son mucho mas constantes, pero fuertes, impresionantemente fuertes...

Son tantas las expectativas, y solo Dios sabe la verdadera misión que tenga para este nuevo ser, al momento yo creo que tiene una muy importante; enseñarnos a ser mejores como pareja, para recibirlo a él, y seguir creciendo juntos.

Y del susto no fue nada... y nosotros solo pedimos: que siga creciendo, sano y muy fuerte.... Porque, 'si está comodo' ya no me preocupa tanto, según nuestra ginecologa dice "que él la pasa muy bien..." :)

Les comparto el video, para que conozcan a mi bebé, y el nuevo motorcito de carne que impulsará su vida desde hoy hasta siempre en su existencia, con la ayuda de Dios.